Entender la diferencia entre continente y contenido en la cobertura de tu seguro de hogar es fundamental para garantizar la protección adecuada de tu vivienda. En este artículo, despejaremos tus dudas sobre estos dos conceptos clave.
Continente: La estructura de tu hogar
El continente hace referencia a todos los elementos y materiales que conforman la estructura de tu vivienda, desde el suelo hasta el techo. Incluye instalaciones como las conducciones de gas, agua, sistemas de telecomunicaciones y cableado eléctrico, así como elementos decorativos y estructurales. Garajes, piscinas y jardines también se consideran parte del continente, siempre que estén en el mismo edificio.
Es importante tener en cuenta cualquier rehabilitación o reforma realizada en la vivienda, ya que estas mejoras pueden aumentar su valor y, por lo tanto, afectar el monto del seguro.
Contenido: Tus pertenencias dentro del hogar
El contenido se refiere a todos los objetos, electrodomésticos y enseres que hayas aportado a tu hogar, ya seas propietario o inquilino. Estos bienes muebles son aquellos que se pueden trasladar sin que su calidad o naturaleza se alteren, como mobiliario, dispositivos electrónicos, electrodomésticos y ropa.
Es importante revisar la cobertura de tu seguro para objetos de gran valor, como joyas, obras de arte y relojes, ya que es posible que necesites una póliza específica para cubrir estos artículos.
Diferencias entre continente y contenido
La principal diferencia entre continente y contenido radica en que el primero se refiere a la estructura inamovible de la vivienda, mientras que el segundo engloba los bienes muebles que pueden trasladarse. Además, el valor del continente es más fácil de determinar, mientras que el contenido depende de la iniciativa del propietario o inquilino.
Cobertura del seguro de hogar
La cobertura de tu seguro de hogar puede variar según la póliza que contrates. Es importante prestar atención a los detalles sobre continente y contenido y consultar con tu aseguradora para conocer las coberturas más habituales.
Para calcular el valor del continente y contenido de tu hogar, debes valorarlos por separado. En el caso del continente, considera variables como los metros cuadrados de construcción, la ubicación geográfica, el estado de conservación y la calidad de la construcción. Para el contenido, realiza un inventario completo y asigna un valor a cada objeto. Un dato orientativo es que el precio del contenido suele situarse en el 30% del precio del continente.